martes, 15 de junio de 2010

Cuando eras uno mas



Tenia el pelo lleno de frizz, pero no me importaba. Hacia frío, tenia la piel seca, los labios blancos y los ojos brillosos. Vos bajabas de auto, eras uno mas del montón. Viniste, te sonreí, te acercaste y te salude.
No eramos nada en especial, ni siquiera me llamabas la atención, ni siquiera te miraba, para que mirarte?

Había muchas cosas adentro mio que nadie me iba a sacar de la cabeza como para preocuparme y darme cuenta que tenias el maggic click para encender mi alma.
No iba a reconocer que adentro tuyo había un diamante en bruto a flor de piel que nunca nadie se había animado a encontrar, no iba a reconocerlo, me parecía idiota pensarlo, era obvio, no lo pensaba, no pensaba en vos, tenia la mente en otro lado.
Eras un conocido, uno mas de los tantos, que podía pasar? todo estaba bien. Estabas sentado en la mesa con tu camisa acuadrille que debo admitir, me gustaba como te quedaba. Te relacionabas con los demás, nunca conmigo, te reías con los otros, conmigo nunca, tampoco me importaba, ya te dije, eras uno mas.
Tenias esa forma de ser extrovertida que me hacia reír, pero no compartía mi risa con vos, no era necesario que sepas que notaba que estabas vivo, a mi no me importaba que lo notes, pensaba que a vos tampoco.
No eramos muchas las personas reunidas y yo no tenia problemas en relacionarme con vos, me caías bien, bah, me dabas lo mismo, para mi estabas bien, eras lindo. 
Teníamos amigos en común y nosotros debido a las horas que pasábamos juntos estábamos comenzando a conocernos, eras como un amigo, pero siempre uno mas del montón.
 Nunca me imagine que ese día me podía cambiar la vida-

Eramos niños no tan niños. Yo estaba mal, tenia muchas cosas en la cabeza, ni hace falta decir que no eras vos ninguna de esas cosas, nunca ibas a ser una cosa por la cual yo podría llegar a estar mal, jaja, que ironía.
Creo que te diste cuenta que estaba mal y para fijar el vinculo se acercaste, quisiste saber que me pasaba, te preocupaste, como te podrías haber preocupado por cualquiera, quisiste saber cual era el motivo y lograste saberlo. En ese momento me di cuenta que eras bueno ademas de lindo, que tenias alma y me caías mejor ahora, seguías siendo uno mas.
Yo seguía mal, cada vez peor. No es que la charla con vos haya sido mala, no me influenciaba para nada, ni iba ni venia, era una charla. Las cosas alrededor nuestro seguían mal, estaban mal, y me mareaban, me recordaban cada vez mas el foco del dolor. Así que decidí concentrarme en que te tenia enfrente, que eras uno mas, que eras lindo, que eras bueno y que estabas conmigo.
Estaba sentada arriba de una mesita y vos enfrente mio escuchándome hablar y haciéndome reír. No ganabas nada, pero sin embargo ahí estabas. Con la charla las cosas de afuera se congelaron y solamente te escuchaba hablar a vos y me reía de tus chistes, si, esta ves si nos reíamos juntos. Me concentre en preguntarme que hacías ahí si eras uno mas. Eras uno mas?
Creo que se me paso muy rápido, pero sentí cuando te acercaste, lo sentí.
Sentí que seguiste un impulso, que no te importo nada, y me besaste. Ya no eras uno mas, definitivamente, no eras uno mas. Eras lindo, bueno, estabas conmigo y me estabas besando.
Un clavo saca otro clavo. Sacaste el clavo por el cual te acercaste, lo desterraste de mi, pero te clavaste vos, mas adentro, mas profundo, mas difícil de sacar. Eras uno mas, ahora sos todo lo demas.

''Hace demasiados meses que mis payasadas no provocan tus ganas de reir.
No es que ya no me intereses, pero el tiempo de los besos y el sudor es la hora de dormir''